Hary Potter y la Orden del Fenix
Guste o no guste, y pese a quién le pese, la saga de Harry Potter ha traido una bocanada de aire fresco tanto a la literatura como al cine fantástico. Durante muchos años la literatura de fantasía ha estado plagada de clones y pseudo-clones de “El señor de los Anillos”, dónde enanos, dragones, elfos y demás seres de la mitología Tolkieniana campaban a sus anchas por mundos dónde el bien y el mal estaban más que claros.
Harry Potter pegó fuerte desde el principio. De hecho, el que ganara el Hugo (junto al Nebula, el premio más prestigioso de fantasía y ciencia ficción) en el 2001 fue una señal de lo que estaba por venir. De todas formas, lo que más me gusta de Harry Potter son las películas. Fantásticas, pero diferentes, entretenidas, con toques oscuros (cada una que viene, más oscura…me encanta), personajes complejos con las más variadas intenciones, y con múltiples lecturas que permiten que tanto jóvenes como adultos disfruten de ellas.
Resumiendo, que estoy como loco porque llegue el estreno de “Harry Potter y la Orden del Fenix” 😀